MEDITACIÓN HO´PONOPONO
Mucha gente me pregunta si medito. Mi respuesta es NO. Es decir, si me preguntas si medito 15 minutos por la mañana y 15 minutos por la noche, entonces la respuesta será NO, porque en realidad medito 24 horas por día. Mi meditación es el Ho’oponopono; esta meditación en realidad se práctica 24 horas al día, 7 días por semana y los 365 días del año.
NUESTRAS memorias y programas están tocando 24 horas por día.
Yo siempre coloco a Dios (Amor) primero en lugar de las memorias, en todo momento, a cada paso que doy, con cada decisión que tomo, no solo 15 minutos por la mañana y 15 minutos por la noche, sino todo el día todos los días.
Ho’oponopono es una manera de pedir ayuda y de dar permiso. Es hacerlo a la manera de Dios en lugar de a mi manera.
Es una ley universal que cuando pides recibirás, cuando tocas a la puerta, esta se abrirá.
Veras, decimos que soltamos y damos permiso a Dios, pero nos preocupamos. Decimos que soltamos y damos permiso a Dios, ¡pero pensamos!
Para ver los resultados, debes soltar 100% y CONFIAR. También debes ACEPTAR que Dios sabe más que es correcto y perfecto para ti. Debido a que tú no sabes que es, tu tarea es soltar y dar permiso a Dios y estar abierto a las oportunidades que surjan en tu camino.
Es necesario que dejes de crear etiquetas: “Esto es correcto”, “Esto es incorrecto”. Esto es correcto, esto no lo es. Esto funciona, esto no funciona. ¡Tú no sabes! Tu intelecto nunca sabrá.
Mi maestro, el Dr. Ihaleakala Hew Len siempre dice que si supiéramos lo que sucede cada vez que decimos “Gracias” o “Te amo”, no dejaríamos de hacerlo nunca. Estaríamos limpiando (soltando) constantemente.
Cada vez que hacemos nuestra parte, dar permiso (soltar), Dios hace Su parte (transmutación). Como nuestro intelecto no puede verlo ni sentirlo, ¡decimos que no funciona! Bien, tenemos mucho para limpiar, por lo tanto continúa limpiando y comienza a confiar.
Hay dos leyes Universales muy importantes que necesitamos recordar: La Ley del Menor esfuerzo (Ho’oponopono) y la Ley del Desapego (Aceptar que todo es perfecto).
Dios es fácil. La vida es fácil. Somos nosotros los que complicamos todo cada vez que nos enganchamos y reaccionamos en lugar de soltar.
Yo sé que cuando tu practiques y confíes, te gustara y estarás de acuerdo conmigo. Este es El Camino Más Fácil.
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